Arrastrada por ello,
arrastrada por el egoismo,
arrastrada por el odio,
arrastrada por el amor enfermizo.
Una vez me tuvieron,
me tuvieron entre sus manos,
sus manos llenas de fango, de angustia, de oscuridad,
en sus pensamientos llenos de obsesiones,
es sus actos llenos de cólera.
Y yo me sentía mera espectadora,
pero no podía escapar,
sus cuerdas de falso amor me tenían atada,
un falso amor que era egoismo, un falso amor que resultó enfermizo.
Conseguí escapar de ese pozo de oscuridad,
cuando ellos se estaban hundiendo cada vez más,
pero mi estrella me llamaba,
me decía que no era ese mi lugar,
que ella me esperaba para poderme enseñar,
para aprender cómo mi corazón iluminar,
para así algún día poder iluminar no solo a unos cuantos,
si no a parte de la humanidad.
Pero ellos empezaron a ver la luz de mi corazón,
y volvieron con sus estrategías,
volvían a buscarme con sus manos,
sus gemidos,
sus artimañas.
Quería mi luz, querían mi alma,
porque allí abajo sentían mucho frio.
"Pero yo no quiero bajar a ese pozo,
yo os ayudaré a conseguir el calor de la luz,
el calor del amor por el amor,
pero tenéis que subir aquí conmigo.
Tenéis que hacer el esfuerzo,
quitaros ese manto de barro y desprecios,
y subir conmigo.
Yo ya no puedo bajar, solo sé subir...
Y vosotros tenéis que aprender a subir
hasta llegar a este nivel,
y entonces aquí sí que todos juntos,
podremos seguir subiendo, y subiendo,
y elevándonos hasta llegar "allí".
arrastrada por el egoismo,
arrastrada por el odio,
arrastrada por el amor enfermizo.
Una vez me tuvieron,
me tuvieron entre sus manos,
sus manos llenas de fango, de angustia, de oscuridad,
en sus pensamientos llenos de obsesiones,
es sus actos llenos de cólera.
Y yo me sentía mera espectadora,
pero no podía escapar,
sus cuerdas de falso amor me tenían atada,
un falso amor que era egoismo, un falso amor que resultó enfermizo.
Conseguí escapar de ese pozo de oscuridad,
cuando ellos se estaban hundiendo cada vez más,
pero mi estrella me llamaba,
me decía que no era ese mi lugar,
que ella me esperaba para poderme enseñar,
para aprender cómo mi corazón iluminar,
para así algún día poder iluminar no solo a unos cuantos,
si no a parte de la humanidad.
Pero ellos empezaron a ver la luz de mi corazón,
y volvieron con sus estrategías,
volvían a buscarme con sus manos,
sus gemidos,
sus artimañas.
Quería mi luz, querían mi alma,
porque allí abajo sentían mucho frio.
"Pero yo no quiero bajar a ese pozo,
yo os ayudaré a conseguir el calor de la luz,
el calor del amor por el amor,
pero tenéis que subir aquí conmigo.
Tenéis que hacer el esfuerzo,
quitaros ese manto de barro y desprecios,
y subir conmigo.
Yo ya no puedo bajar, solo sé subir...
Y vosotros tenéis que aprender a subir
hasta llegar a este nivel,
y entonces aquí sí que todos juntos,
podremos seguir subiendo, y subiendo,
y elevándonos hasta llegar "allí".
estoy a tu lado
ResponderEliminarLo sé mi guerrera.... lo sé
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